Los módulos prefabricados tienen múltiples aplicaciones en el ámbito deportivo. En particular, las áreas de vestuarios, duchas y baños son fundamentales para cualquier gestor deportivo. La inclusión de vestuarios modulares es una opción muy interesante que aporta numerosas ventajas.
Cómo es el diseño de vestuarios prefabricados para instalaciones deportivas
Dependiendo del tamaño de la instalación deportiva y la cantidad de usuarios, la zona de vestuarios debe contar con suficientes metros cuadrados, separados e independientes para hombres y mujeres, además de un vestuario aparte equipado para personas con movilidad reducida, con su propia ducha e inodoro adaptado.
Es crucial diseñar una zona diáfana con bancos y taquillas donde los usuarios puedan cambiarse de ropa cómodamente. También se deben instalar suficientes duchas, considerando que los usuarios pueden turnarse.
La zona de vestuarios debe incluir baños con inodoros y lavabos, y es fundamental asegurar una buena ventilación mediante grandes ventanas o ventanucos, debido a la alta humedad provocada por el sudor, la ropa húmeda y el calor del agua de las duchas.
Los módulos prefabricados, adosados o apilados en más de una altura, son una excelente solución. A partir de un proyecto inicial, se pueden unir módulos para lograr la superficie deseada y, mediante divisiones internas con panel sandwich, crear fácilmente las diferentes estancias.
Los sanitarios, ya sean duchas, inodoros o lavamanos, se instalan con sencillez en los módulos y pueden tener salida vertical, perforando el tablero del suelo, o salida lateral/horizontal, dependiendo de las preferencias del cliente o de las especificaciones del proyecto.
Además, los vestuarios modulares pueden formar parte de un proyecto más ambicioso, diseñándose áreas independientes para recepción, despachos, consultorios médicos o de fisioterapia, zonas de masaje, sauna, spa, gimnasio, entre otros.
Ventajas de los vestuarios modulares para instalaciones deportivas
- Superficie adaptable: Desde pocos metros cuadrados hasta ilimitada, mediante el adosamiento o apilamiento de módulos.
- Integración eficiente: Incorporación de duchas, lavamanos, inodoros y áreas de vestuario de manera conveniente.
- Fabricación y montaje rápidos: Entre 5 y 9 semanas, según la complejidad del proyecto o la carga de trabajo en la fábrica.
- Transportabilidad: Desmontables y trasladables en cualquier momento o necesidad.
- Ampliación fácil: Posibilidad de añadir piezas o módulos adicionales.
- Diseño personalizado: Adaptación total a las necesidades específicas del cliente.
- Higiene óptima: Facilidad de limpieza con productos industriales o hidrolimpiadoras de alta presión, gracias a la resistencia de los materiales.
- Tramitación sencilla: Proyectos y licencias más rápidas y simples, ya que se consideran obra menor por ser módulos prefabricados y no construcción tradicional.
- Confort y aislamiento: Módulos cómodos y homologables para casi cualquier actividad.
- Reutilizables y reciclables: Alta durabilidad si se realiza un buen uso.
- Costo competitivo: Igual o inferior a la construcción tradicional, con muchas ventajas adicionales.
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